sábado, 27 de febrero de 2010

INTRODUCCION A LA HISTORIA - MARC BLOCH

El libro esta dividido en cinco capítulos en los cuales da respuesta a la interrogante ¿que es la historia y para que sirve?, en el se escribe una verdadera filosofía de la historia, esencial para la comprensión de esta ciencia que estudia a los “hombres en el tiempo”. Desplazado después de ser sargento conoció a Lucien Febvre y junto con el fundaría la escuela de los Anales. Tras la primera guerra mundial se desempeña como catedrático en la universidad Stransburgo; estando prisionero escribió su obra “Apología para la historia”, la cual rescato Lucien Febrve y la edito con el nombre de “Introducción a la historia”, fue fusilado por la barbarie Nazi en 1944. Logro escribir dos textos fundamentales: Introducción a la Historia y la Extraña derrota”.
Esta obra tiene como objetivo dar una visión de la historia, en la cual se va ha plantear diferentes preguntas las cuales se van ha ir desarrollando en esta reseña. Hablar de un concepto fijo de la historia es algo superficial ya que el concepto de historia es manejado en la actualidad con mucho cuidado, ya que ningún docente puede lanzarse a atribuirse el derecho de dar o brindar un concepto definido, la historia en tiempos pretéritos mas que una ciencia era un conocimiento mas, es decir lo tomaban como cultura general, por esto va ha ir cambiando a medida que se le otorgue la respectiva importancia como ciencia social. ¿Para que sirve la historia? Esta cuestión ha sido planteada muchas veces y es un tanto difícil de responder porque la historia brinda su apoyo que va del tiempo pretérito al presente, pero esta interrogante tiene que ser hecha por cualquier persona instruida, es decir por alguien que le apasione la historia, que le divierta; eso es lo que llamaría Marc Bloch “vocación”. El estudio de la historia es el hombre y como ciencia tiene sus propios placeres estéticos, la historia ha sido reemplazada en algunos casos por carreras eminentemente naturales y técnicas.
Dentro del capitulo de la historia, los hombres y el tiempo, se encuentran varios temas: la elección del historiador, el trabajo del historiador, no es el de observar y escribir, sino, el de definir cuidadosamente los hechos no necesariamente para descubrir la verdad sino para tratar de acercarse al conocimiento frente a una inmensa y confusa realidad. El decir que la “historia estudia el pasado”, es una forma impropia de expresarse. En si la historia estudia al hombre actuante y si despierta el pasado es para conocer mejor su presente y así futurizarse. La historiografía se inicia con narraciones, memorias, crónicas, hasta llegar a la historiografía que critica y analiza, para conocer la historia se junta las diferentes ciencias para así llegar a un mejor conocimiento de la historia. El objeto de estudio de la historia es el desarrollo del hombre en la sociedad. La historia es la ciencia del hombre en el tiempo, no se basta con saber de los héroes, fechas importantes, sino, en comparar acontecimientos sucedidos en la otra parte del mundo. Ahora un hecho histórico es un cambio continuo y perpetuo.
Debido a la nueva información que proporcionan los historiadores. Es esto lo que se considera como tiempo histórico. La obsesión del trabajador social, ha sido conocer los orígenes, cuando se habla de orígenes no es descripción, sino también la explicación y las causas del hecho, sin embargo se confunde en el describir y en el explicar, porque el verdadero problema es el como y el porque se produjo un hecho histórico. La historia esta lejos de haber sido esclarecida, porque siempre permanece el porque y que ocurrió, un fenómeno histórico nunca puede ser explicado a totalidad, pero si aproximarse a la realidad. Para poder conocer la realidad (presente) se necesita el origen de las cosas, porque una realidad se comprende mejor por las causas, decir que hay un limite entre el pasado y el presente es una forma impropia de expresarse porque ambos mantienen una relación de causa –efecto, es decir un dialogo sin fin entre el presente y el pasado. Por eso se piensa que el presente humano es susceptible de conocimiento científico porque descubriendo cosas nuevas del pasado se puede modificar el presente. Para poder conocer y comprender el presente se necesita conocer el pasado y viceversa. Estudiar el presente dejando de lado el pasado no te lleva a un conocimiento del todo valido, para poder comprender un hecho pasado es necesario enfocarse en el momento en el que sucedió, la mentalidad en su tiempo, el ambiente de su tiempo, la política, etc.
El experimentar y observar un hecho no equivale a que sea un dato verdadero, sino se busca una comparación para aproximarse al conocimiento. También sabemos que el hombre como la sociedad ha sufrido cambios que ha sucedido a través del tiempo.
El presente también tiene datos para reconstruir el pasado, a través del razonamiento deductivo –inductivo y la imaginación y la reconstrucción de hechos, el camino inicial de toda investigación es el que empieza del conocimiento conocido al conocimiento oculto, pero el ir de lo conocido a lo ignorado tiene su riesgo porque en cierto momento se puede perder la línea de tiempo, en ese caso es necesaria la intuición, el razonamiento y la imaginación del historiador. La observación histórica de un hecho ocurrido en un tiempo pretérito o pasado inmediato, se halla en la imposibilidad de ser comprobado en su totalidad, ya que el investigador social no puede transportarse en el tiempo, pero utiliza testimonios humanos, es decir, documentos dejados por los hombres, y en el caso que no haya existencia de documento, el trabajador social utiliza documentos materiales, es decir, huellas dejadas por el hombre. Por ello se dice que el historiador esta condenado a una observación eternamente dependiente. Marc nos dice que el pasado es un tirano y este le prohíbe que sepan de el lo que el mismo no les entrega científicamente o no.
La transmisión de documentos dejados desde el inicio del hombre hasta nuestros días ha sido recopilada y conservados por diferentes instituciones. Estos documentos se encuentran en bibliotecas, archivos, los cuales son utilizados por el investigador social, estas herramientas en algún momento han sido dejadas de lado y por ende ha habido problemas de perdida e ignorancia de documentos, pero esto no lleva al trabajador social prescindir de sus herramientas, porque una ciencia no puede prescindir de ellas, pero cualquiera que sea la edad de la humanidad que el investigador estudie, los métodos de observación son los mismos o uniformes.
El investigador se ve obligado a llevar a cabo sus investigaciones en un terreno cada vez mas amplio, en el cual se topara con narraciones que no son verídicas y a su vez huellas materiales que han sido falsificadas, sin embargo, no puede negarse que el falso testimonio fue lo excitante, que provoco los primeros esfuerzos de una técnica diferida a la verdad, dicho sea de paso este es el punto del que se debe partir para desarrollar un verdadero análisis critico.
Los documentos usados por el historiador para realizar una investigación son de entera confianza y/o credibilidad, como sabemos toda ciencia se ve influenciada con la mentira, lo cual ocurre con nuestra ciencia, es como una impostura, capas de invalidar un testimonio. Esta mentira no es fácil de percibir, nosotros podríamos tener en nuestras manos un documento aparentemente verdadero, pero si se hace un breve análisis, este hecho podría estar sobre un fondo aproximadamente verídico, impregnado de detalles. Pero esto no imposibilita al investigador social al no llevar a cabo su trabajo, sino realizarlo con sumo cuidado mediante un previo análisis.
Por ello se debe emplear un razonamiento veraz antes de aceptar un documento como autentico, ya que no debe existir duda alguna sobre la legitimidad del documento, como por secuencia del investigador social se esfuerza por hacer un arduo análisis crítico.
En el transcurrir del tiempo el investigador social va ir adquiriendo nuevos conocimientos, los cuales van a servir para analizar y comprender un documento. Este documento es susceptible de cambio ante un nuevo conocimiento recibido que es producto de las investigaciones.
El libro de Marc Bloch nos muestra la importancia que se le a otorgado a la historia en el tiempo. Este nos da a conocer que la escencia de la historia radica en estudiar un presente inmediato y a la vez puede ser enlazado con otro tiempo histórico, y esto contribuye a la veracidad de un conocimiento; lo cual se llevara a cabo por medio de un análisis y una critica de documentos.

“HISTORIA DEL TAHUANTINSUYU”

“HISTORIA DEL TAHUANTINSUYU”:
Autora: María Rostworowski de Diez Canseco
Reseña Histórica:
María Rotworowski (1915-Barranco), etnohistoriadora peruana inició sus publicaciones en 1953 con su obra Pachacutec Inca Yupanqui desde entonces se a dedicado a estudiar la historia del antiguo Perú, buscando información en archivos peruanos y extranjeros. Miembro fundadora del Instituto de Estudios Peruanos y miembro de la Academia Nacional de la Historia. De ella proviene el solemne libro que a continuación citaremos que fue uno de los libros de ciencias sociales mas vendidos de la historia peruana. En Historia del Tahuantinsuyu la autora nos plantea dos dificultades muy serias. Una relacionada con el modo andino de recordar y transmitir los sucesos; y la otra, con el criterio de los españoles para interpretar y registrar información que luego nos dejaron en las crónicas. La suma de ambas se refleja en toda la información escrita que nos llega a partir del Siglo XVI en lo que fue el incario que ocupo desde Ancas Mayo por el norte y hasta el rio Maule por el sur. Ocupando así Quito, Chachapoyas, Cajamarca, Lago Junín, Cuzco, Charcas, Tucumán, Chile y la costa norte y sur toda.
Como sabemos conforme las investigaciones existieron muchos métodos para conservar en la memoria los acontecimientos: pinturas, cantares y una fuente mnemotécnica. En el incario la falta de escritura no fue un obstáculo insalvable para guardar y rememorar su pasado. Es por esto que no debemos dejarnos de hacer un par de preguntas: ¿Por qué tantas contradicciones en el relato incaico si poseyeron medios empíricos para recordar los hechos? ¿A que se debe la inconsistencia del registro andino del pasado?
Por otro lado los europeos que llegaron a estas costas en el siglo XVI tenían la preocupación de conquistar nuevas tierras, el mundo andino era demasiado original, distinto y diferente para ser comprendido por hombres venidos de ultramar, preocupados en enriquecerse, conseguir honores o evangelizar por la fuerza a los naturales. Desde allí debió formarse un abismo entre el pensamiento andino y el criterio español, abismo que hasta la fecha continua separando a los miembros de una misma nación.
Los cronistas cuentan que en una temprana fecha las construcciones eran de humilde hechura, y una ciénaga cubierta de juncos, originada por dos manantiales no encausados, mas tarde se construiría allí las estructuras de Sacsahuaman. Sarmiento de Gamboa recogió de labios de los orejones cusqueños que la aldea de Acamama constaba de cuatro secciones: Quinti Cancha, Chumbi Cancha, Sairi Cancha y Yarambuy Cancha. Los Ayarmacas desempeñaron un rol importante en los inicios del Cusco, no se trata de un grupo mítico, pues se ha podido rastrear desde los inicios, en la llegada al Cusco del grupo de Manco Capac, y luego a través del incario, en los relatos de los cronistas, junto con los ayllus pinahuas formaban la dualidad andina, existían dos ayllus pinahuas en la época de la colonia: uno el distrito de Oropesa y el otro en Guaillabamba, al narrar los sucesos sobre Tocay y Pinahua Capac nos adelantamos a la llegada y establecimiento del grupo de Manco al Cusco para mostrar la antigüedad e importancia de los ayarmacas como una macro etnia soberana en la región. Es necesario tener claridad sobre la situación sociopolítica del lugar del Cusco en tiempos de la aparición de los nuevos pobladores, ya no con un enfoque arqueológico sino etnohistórico.
El mito de los hermanos ayar, forma parte de la tradición mítica sobre el desenvolmiento inca, las panacas lo son en el sentido que mediante ellas se elaboro por decir así la sociedad en el incario, en la expansión y desarrollo dentro del libro veremos lo que fueron sus conquistas, las batallas que libraron para lograr su expansión como la conquista de la cultura Chincha que fue una conquista pacifica o las conquistas de Túpac Yupanqui o Huayna Capac; como también las rebeliones de los señoríos locales y de miembros de la nobleza, y el enfrentamiento entre Huáscar y Atahualpa.
Aunque no fue un imperio como el de roma, el Tahuantinsuyu tuvo aspectos organizativos en el cual se comprenden: la composición social, es decir que existió una elite superior que constaba del inca, curacas yana, los administradores, los sacerdotes, hechiceros y adivinos, los mercaderes, los tratantes chinchanos, los tratantes norteños y también existió las clases populares que eran los artesanos, los hatun runa, los pescadores, los mitmaq, los yana, las mamacona, los piña.
Es indispensable comprender que al no existir dinero en el Estado inca la riqueza debía apoyarse en la posesión de ciertos recursos que podían ser medidos y contabilizados. Con ellos el gobierno podía planificar sus posibilidades y hacer frente a sus necesidades. ¿Cuál podría ser ese patrimonio que le permitiera dominar y controlar los aspectos económicos y políticos? Al punto de vista de la autora y conforme las investigaciones se funda en el acceso a tres fuentes de ingreso: La fuerza de trabajo, la posesión de tierras, y la ganadería estatal. Estos bienes en poder del Estado eran la riqueza mas preciada pues significaba disponer de una serie de ventajas, siendo la principal la de controlar la reciprocidad, clave de todo el sistema organizativo andino, y que permitió no solo la expansión territorial sino mantener el engranaje del régimen.
El modelo económico inca se ha calificado de redistributivo debido a las funciones que cumplía el propio gobierno. Esto significa que gran parte de la producción del país era acaparada por el Estado, el cual a su vez distribuía según sus intereses. Valensi da una definición del principio de la redistribución que presupone un modelo de centralismo institucional. Las sociedades dominadas por la redistribución, la producción y la repartición de bienes se organizan en función de un centro – se trate de un jefe, un señor, un templo o un déspota-, él reúne los productos, los acumula y los redistribuye a sus agentes, asegura el mantenimiento y la defensa de servicios comunes, conserva el orden social y político. Este principio es favorecido por el modelo institucional de la simetría en la organización social. La reciprocidad interviene en la producción, las prestaciones de servicios, la distribución periódica de tierras, así como en la repartición de los productos, en la práctica de dones y contradones.
Polanyi admite que la redistribución juega un papel en sociedades diversas, en homogéneas y en estratificadas. Reciprocidad y redistribución se combinan en la sociedad, la primera corresponde a la forma horizontal del intercambio a escala, la segunda a la forma vertical entre unidades locales y autoridad central. Con la formación del Estado inca se produce un desarrollo de fuerzas productivas y un crecimiento económico dinamizado. Por años se alabo y considero la organización inca como la materialización de una utopía, admirada por europeos. Se creía que el almacenamiento de productos de toda índole tenía fines humanitarios. Esa apreciación solo demuestra una incomprensión de mecanismos económicos de ese Estado. Gran parte de la redistribución era consumida por el sistema de la reciprocidad, por el cual el Estado constantemente renueva grandes “donativos” a los diversos señores étnicos, jefes militares, a las huacas, etc.La autora tiene razón al decir que debemos ver la situación sociopolítica del Cuzco en tiempos de aparición de nuevos pobladores de una manera etnohistórica, por que lo arqueológico solo barca la búsqueda de técnicas usadas en sus expresiones artísticas, sin embargo la etnohistoria nos ayudar a definir sus razones por las cuales hicieron esto ya sean motivos ceremoniales o artísticos o es mas uso cotidiano de tales expresiones artísticas. Mediante la etnohistoria sabemos que muchas cultura sometidas por el incario trataron de rebelarse mucho antes de la aparición de los españoles, por esto que cuando aparecieron los españoles muchas de las personas que fueron sometidas por los incas vieron en ellos una oportunidad para sacudirse de los soberanos cusqueños, momento favorecido por los cambios en el poder. De no haber llegado nuevos contingentes europeos, los naturales hubieran desbaratado a los extranjeros y recuperado su autonomía. La fragilidad de las bases sobre las cuales reposaba el Estado inca era excesiva como para hacer frente a la rebelión de los grandes señores andinos y a la conquista europea con superior tecnología

Analisis del discurso

ESCRITOS SOBRE METODOS Y TECNICAS DE LA INVESTIGACION SOCIAL
CAPITULO I
ANALISIS DEL DISCURSO: DEFINICIÓN DE IDEOLOGÍA
La primera suposición es que cualesquiera sean las ideologías, son principalmente algún tipo de `ideas', es decir, son sistemas de creencias. Esto implica, entre otras cosas, que las ideologías, como tales, no comprende las prácticas ideológicas o las estructuras sociales (p.ej., iglesias o partidos políticos) basadas en ellas. También implica que una teoría de la ideología necesita un componente Cognoscitivo que pueda dar cuenta apropiadamente, por ejemplo, de las nociones de `creencia' y de `sistema de las creencias', dado que de éstas se ocupa la ciencia cognoscitiva contemporánea.
En segundo lugar, así como no hay ningún idioma privado, no hay ninguna ideología privada o personal. De allí que los sistemas de creencias son socialmente compartidos por los miembros de una colectividad de actores sociales. Sin embargo, no cualquier colectividad desarrolla o necesita una ideología, y puede argumentarse que éste es sólo el caso para algunos tipos de grupo –típicamente en relación con otros grupos– y no para comunidades como, por ejemplo, Comunidades culturales, nacionales o lingüísticas. En otros términos, las ideologías consisten en representaciones sociales que definen la identidad social de un grupo, es decir, sus creencias compartidas acerca de sus condiciones fundamentales y sus modos de existencia y reproducción. Los diferentes tipos de ideologías son definidos por el tipo de grupos que `tienen' una ideología, tales como los movimientos sociales, los partidos políticos, las profesiones, o las iglesias, entre otros.
En tercer lugar, las ideologías no son cualquier tipo de creencias socialmente compartidas, como el conocimiento sociocultural o las actitudes sociales, sino que son más fundamentales o axiomáticas. Ellas controlan y organizan otras creencias socialmente compartidas. Así, una ideología racista puede controlar las actitudes sobre la inmigración, una ideología feminista puede controlar las actitudes sobre aborto o techos de vidrio en el lugar de trabajo o conocimiento sobre la desigualdad del género en la sociedad, y una ideología social puede favorecer un papel más importante del Estado en los asuntos públicos. De allí que las ideologías sean creencias sociales fundamentales de naturaleza bastante general y abstracta. Una de sus funciones cognoscitivas es proporcionar coherencia (ideológica) a las creencias de un grupo y así facilitar su adquisición y uso en situaciones cotidianas. Entre otras cosas, las ideologías también especifican qué valores culturales (libertad, igualdad, la justicia, etc.) son importantes para el grupo.
En cuarto lugar, como fundamento sociocognitivo de grupos sociales, las ideologías son adquiridas gradualmente y (a veces) cambian a través de la vida o de un periodo de la vida, y ahí que necesitan ser relativamente estables. Uno no se vuelve pacifista, feminista, racista o socialista de la noche a la mañana, ni hace un cambio de perspectiva ideológica básica de un día para otro. Normalmente son necesarios muchas experiencias y discursos para adquirir o cambiar las ideologías. En consecuencia, la variabilidad a menudo observada en las opiniones ideológicas de miembros de un grupo debe ser considerada como de carácter personal o contextual, y de ningún modo justifica el rechazo de la noción de una ideología de grupo compartida, estable.
También lo contrario es cierto: si bien las ideologías pueden ser desarrolladas gradualmente por (los miembros de) un grupo, también se desintegran gradualmente; por ejemplo, cuando algunos miembros ya no creen en una causa y `salen' del grupo, cuando las quejas del grupo no han sido atendidas, o bajo un cúmulo de otras condiciones sociales y políticas, como por ejemplo, fue el caso de los movimientos pacifistas y antinucleares de los años setenta.
A veces, se comparten las ideologías de manera tan amplia que ellas parecen haberse vuelto parte de las actitudes generalmente aceptadas de una comunidad entera, como creencias obvias u opinión, o sentido común. Así, mucho de lo que hoy ampliamente se acepta como Derechos sociales o humanos, tales como muchas formas de igualdad del género, eran y son creencias ideológicas de los movimientos feministas o socialistas. En ese sentido, y por definición, estas
creencias pierden su naturaleza ideológica en cuanto se convierten en parte del ideario social común. Es sólo en este sentido que yo estaría de acuerdo en usar la frase `el fin de la ideología', dado que, obviamente, nuestro mundo contemporáneo está repleto de las ideologías, especialmente por aquéllas que niegan ser ideologías.

LA ADQUISICIÓN DISCURSIVA DE IDEOLOGÍAS

Aunque las ideologías pueden ser adquiridas por la socialización de grupo en muchas prácticas sociales, por ejemplo, en la casa, en la escuela, en el trabajo o en el bar, las fuentes primarias y los medios del `aprendizaje' ideológico son el habla y el texto. Es decir, las ideologías normalmente no son adquiridas imitando meramente las acciones de otros miembros de grupo. Tales procesos de observación y participación normalmente se acompañan de razones y explicaciones (por ejemplo, `Nosotros no admitimos X, porque las personas como nosotros no se mezclan con personas como X) que pueden implicar (tácita o explícitamente) auto-atribuciones de superioridad y atribuciones de inferioridad o `diferencia' a otros.
Así, desde la infancia, los niños gradualmente aprenden algunos elementos básicos de ideologías de género, de etnicidad, de clase, de religión, de política, y así sucesivamente, creciendo, participando y educándose en los respectivos grupos sociales de que son miembros. Cada uno de estos grupos tiene modos más o menos explícitos, formalizados e institucionalizados de enseñar las ideologías a los nuevos miembros, por ejemplo, mediante reuniones especiales, la instrucción, la catequesis, libros de texto, folletos de propaganda, sermones, y así sucesivamente, esto es, por medio de varios tipos de discurso.
Considerando que algunos géneros de discurso pueden fijar las ideologías más o menos implícitamente, el discurso ideológico didáctico es mucho más explícito al formular los contenidos generales del esquema ideológico del grupo: quiénes somos (de dónde venimos, cuál es nuestra apariencia, quién puede ser miembro de nuestro grupo, etc.); qué/a quién apoyamos, cuáles son nuestras normas y valores, quiénes son amigos y quiénes enemigos, cuáles son nuestros recursos de poder, etc.). Esto proporciona razones y argumentos en cuanto se refiere a las normas generales y valores, y en consideración de los intereses del grupo y sus miembros; sobre lo que es bueno y malo, justo o injusto. Da ejemplos, y proporciona imágenes de dioses y líderes venerados y de otras personas ejemplares. Cuenta historias sobre héroes y villanos.
Así, el discurso ideológico desarrolla gradualmente el marco ideológico general del grupo. Éste es un proceso lento. Los niños menores escasamente tienen nociones ideológicas. La mayoría de las ideologías son explícitamente adoptadas y aprendidas en la adolescencia o la temprana adultez – típicamente cuando las personas son estudiantes, y necesitan dar un significado más amplio tanto a sus acciones y objetivos como al mundo en que viven.
Éste no es el lugar para detallar el proceso de aprendizaje ideológico pero, si aceptamos que tal adquisición tiene lugar principalmente a través del discurso, entonces podemos conjeturar que esto pasa siguiendo el proceso inverso de la producción ideológica del discurso esbozada anteriormente. Las personas interpretan los discursos como modelos mentales. Los marcadores ideológicos orientan a los destinatarios en la manera como son representados los actores de los grupos endógenos y de los grupos exógenos en tales modelos mentales. Tanto el texto como el contexto de la comunicación repetida del mismo tipo conducen a la generalización y abstracción de modelos mentales y a actitudes más generales, basadas en el grupo. Y finalmente, varias actitudes en una parcela de la sociedad pueden ser incluidas en proposiciones ideológicas más generales.
Es decir, las ideologías pueden aprenderse desde abajo, a saber, generalizando los modelos mentales (las experiencias, las historias concretas) hacia representaciones mentales socialmente compartidas y normalizadas, o desde arriba por la instrucción ideológica explícita por parte de ideólogos de varios tipos (líderes, maestros, sacerdotes, etc.). Algunas ideologías tenderán a ser aprendidas más explícitamente y, en consecuencia, desde arriba tales como aquéllas de metodología científica, religión, e ideologías políticas (el pacifismo, etc.). Otras son mucho más implícitas e integradas a las prácticas de vida cotidiana, como las ideologías de género, raza o clase. Ellas tienden a ser explícitas en casos de conflicto, lucha o resistencia. Será una de las mayores tareas empíricas del análisis del discurso ideológico examinar sistemáticamente las estructuras y estrategias de estos diferentes tipos de discursos ideológicos y su papel en la adquisición y reproducción de ideologías por los miembros de grupos, y por los grupos en conjunto. Muchos de estos procesos sociales y cognoscitivos de adquisición pueden estudiarse por el análisis sistemático de tales textos y contextos didácticos.

martes, 23 de febrero de 2010

TRABAJO DE CAMPO

El método tradicional de educación en el proceso aprendizaje de la realidad
De esta manera al educando se le dificulta el aprendizaje de la dinámica espacial, las interrelaciones existentes entre los elementos que componen el ambiente y su problemática. El alumno se siente disociado de su realidad, lo cual trae consigo el aislamiento de la escuela respecto a la comunidad a la cual sirve, por lo que se fomenta poco la criticidad y la participación de la escuela en la soluciones de problemas presentes en la realidad comunitaria del entorno escolar. Al respecto Tetelbum (1978) señala que:
"La metodología tradicional basada en el libro de texto y la clase magistral se revela insuficiente cuando en la enseñanza se pretende abordar la infinitadiversidad del mundo físico y de la complejidad creciente de las relaciones sociales y del comportamiento humano" (p.84).
De acuerdo a esta afirmación dicha metodología impide comprender la totalidad implícita en la dinámica real. La metodología tradicional sólo tiene como resultado un aprendizaje memorístico, repetitivo dificultando la formación de valores y la conciencia social que pretende lograrse mediante la educación. No se motiva el educando a la participación debido a la falta de relación con la realidad en la cual se encuentra inmersoel individuo, con sus necesidades y los problemas de la comunidad en donde vive, los cuales confronta diariamente; en esta medida el aprendizaje no es significativo por ser descontextualizado del aspecto, social, político, histórico y económico del momento.
Ante esta situación presente en la praxis educativa Venezolana actualmente, las instituciones de formación docente del país deben capacitar al participante para el desarrollo de estrategias metodológicas para el trabajo de campo y permita así la sensibilización,el análisis y la síntesis de una problemática presente en un ámbito espacial dado, como sus relaciones con otros espacios a diferentes escalas.
Las prácticas de campo como recurso didáctico
El trabajo de campo se justifica y cobra sentido e importancia cuando se busca el conocimiento profundo de la realidad Nacional en sus dimensiones de espacio y tiempo, así como del conocimiento y la valorización de las influencias que sobre ellas convergen desde diferentes partes del mundo y que, indudablemente, gravitan sobre el acontecer nacional De acuerdo a lo anteriormente expuesto, el futuro educador debe poseer un conocimiento sobre la realidad nacional, tanto en su ámbito espacial como temporal; es decir, geohistoricamente, para lo cual se hace imprescindible desarrollar aptitudes metodológicas acordes con tal exigencia, que le permita enfrentarse ante una situación cambiante, dinámica y compleja con una visión de totalidad, por lo que la educación debe partir de una realidad social concreta.
Dada la complejidad del conocimiento y del mundo actual, así como de los cambios que se perfilan en el acontecer diario, estos demandan la necesidad de producción de nuevas nociones, el trabajo de campo cobra vigencia en las ciencias sociales, sobre todo en el ámbito de las maestrías, donde el docente se perfila como investigador.
Sauwéns (1998) concibe al trabajo de campo como un recurso didáctico metodológico de gran importancia en el hecho educativo: "Que enriquece la experiencia personal del alumno y no tiene que considerarse una actividad extraordinaria, sino más bien una parte constitutiva del trabajo normal de clase" (p.112).
La complejidad de la problemática social puede ser abordada con un enfoque geohistórico, contemplando un análisis tanto sincrónico como diacrónico de los hechos y esto es factible a través del trabajo de campo, en donde el alumno, orientado por el profesor, a juicio de Sauwens (ob.cit.) realiza un análisis sincrónico: "Cuando ubicado en un espacio geográfico, después de la observación directa, estudia las relaciones sociales fuera del devenir histórico, para su análisis presente. De igual forma el análisis diacrónico, al referirse a las relaciones sociales a través del tiempo, para ver su origen (formas pasadas) y la trascendencia (futuro)" (p.80).
Este enfoque permite la aplicación de la teoría crítica en el análisis de la problemática social, dialécticamente, como resultado de un proceso histórico donde la categoría de modo de producción juega un papel importante para entender una situación determinada.
El método de observación directa en el trabajo de campo
Sauwéns considera que la observación directa, base del trabajo de campo, permite reconstruir la realidad teórica de un momento histórico con toda su problemática, el educando puede demostrar sus habilidades para ello, en un proceso de acción-reflexión que conlleva a la práctica consciente. Dicho proceso, de acuerdo a la concepción Freiriana, se logra cuando el sujeto se relaciona en el mundo y con el mundo lo cual le permite proyectarse, reflexionar. Freire (1976) afirma que: "Existe una reflexión del hombre hacia una realidad. El hombre tiende a captar una realidad haciéndola objeto de sus conocimientos.
Es decir, para reflexionar es necesario observar, estar en una realidad." (p.25).
Según Stoddart (1986): "El problema con el trabajo de campo en la geografía tradicional ha sido su poca habilidad para reconocer que la observación es un procedimiento cargado de teoría. En los trabajos de campo ideados correctamente, el descubrimiento se
convierte en el test de una predicción, y la exploración es el proceso por el cual se lleva a cabo ese test." (p.30).
El investigador necesita tener una concepción teórica y metodológica definida para poder abordar el estudio de la realidad, para poder observarla, percibir y descubrir la gama de relaciones que existen en ellas, así como su proceso temporo -espacial, captar la totalidad dentro de la diversidad, en fin su complejidad.
El hombre observa los espacios para comprobar suposiciones pero a la vez esto le permite conocer el mundo y crear nuevas teorías, producir conocimientos de acuerdo al presente histórico, a los cambios que la realidad experimenta. Pero es necesario reconocer que en el terreno de lo concreto existen elementos explícitos e implícitos íntimamente ligados y que el observador debe saber descubrirlos y ubicarlos en su dimensión geohistórica. De lo contrario se puede caer en la acriticidad, en la simple descripción y ese no es el objetivo en las ciencias sociales.
Sauwéns (ob.cit.) afirma que la observación directa permite lo siguiente:
a.- Puede llevarse a cabo con un propósito definido; tal como, conocer la realidad social y concreta de un espacio geográfico objeto de estudio.
b.- Corroborar los elementos del conocimiento teórico, manejados en clase, con los del área de estudio en la praxis del espacio geográficos tratados.
c.- Como también constatar los resultados del producto de una investigación efectuada en el campo de las ciencias sociales a través del estudio de una muestra y/o diagnóstico (localidad - comunidad - nacional) llevada a cabo con fines investigativos pedagógicos de un espacio geográfico determinado.
d.- Hecha sobre realidades empíricas.
e.- Implica una situación de dudas que deseamos clasificar o resolver en función de una necesidad.
f.- Puede referirse a un tema seleccionado, por la cual esta puede ser original, útil e importante e inclusive delimitado en términos precisos, claros en relación con un estudio en un tiempo y espacio geográfico especifico. (p. 33-34).
Según este autor, la observación directa puede llevarse a cabo tanto para conocer una realidad como para confrontar el conocimiento teórico adquirido o investigaciones realizadas con la realidad para aclarar su utilidad para las ciencias sociales al poner al individuo en contacto con la gente, con sus problemas, con la dinámica espacial.
El trabajo de campo a través de la observación directa constituye un eje de motivación y sensibilización para el desarrollo de la actividad cognoscitiva de los alumnos que comprenden según Barraqué (1991) "La adquisición de conocimientos y habilidades... así como el desarrollo de sus capacidades e interés cognoscitivo (p.36)".
Según el autor, este proceso va de la percepción viva al pensamiento abstracto y luego a la práctica. Para ello se organiza el proceso cognoscitivo partiendo de objetos geográficos de la realidad a través del conocimiento sensorial que comprende la sensación, la percepción y la representación que sirve de base el conocimiento racional (vinculadoscon el lenguaje) con sus formas: concepto juicio y racionamiento todo ello forma una unidad cognoscitiva compleja.
Barraqué (ob.cit.) afirma que: "La sensación refleja en la conciencia de los alumnos las propiedades aisladas de los objetos geográficos, mientras que la percepción refleja una imagen integral como un todo único, y la representación reconstruye mentalmente, la imagen del objeto geográfico percibido con anterioridad. El concepto refleja las propiedades y nexos esenciales del objeto fenómeno o proceso geográfico y se caracteriza por el alto nivel de sus actividades mentales: análisis, síntesis, abstracción y generalización. El juicio define los limites del concepto, y su expresión es la oración, mientras que el razonamiento permite la adquisición de conocimientos nuevos, mediante la comparación de juicios" (p.36).
De acuerdo a lo expuesto anteriormente, para que el hombre adquiera un conocimiento de la realidad es necesario que se produzca en él un proceso de sensación esto significa captar los estímulos del mundo exterior a través de los sentidos. Esta gama de estímulos puede ser más rica cuando el alumno está en contacto con el ambiente en lugar del salón de clase, por lo tanto la percepción adquirida será más completa. La realidad percibida conjuntamente con los conocimientos obtenidos y la experiencia acumulada son la base para la formación de conceptos y la generalización.
Dentro de las razones que justifican el trabajo de campo Sauwéns (1988) señala que "Brinda la oportunidad de colocar en un espacio concreto al educando, a objeto de que visualice y capte su entorno, luego descubrir, constatar, analizar y explicar, produciendo su propia síntesis según objetivos propuestos para tal fin". (p.78). De acuerdo a esto el trabajo de campo estimula la capacidad cognoscitiva del alumno, de allí que pueda ser capaz de analizar y sintetizar una realidad. Es una estrategia metodológica activa de aprendizaje.
Reflexiones finales
Para finalizar cabe destacar la opinión de Ramón Tovar en su libro "Geografía, ciencia de síntesis", sobre el trabajo de campo cuando argumenta que "Cada excursión arroja un sin número de experiencias tanto científicas como pedagógica. Es con ellas como podemos alcanzar la vivencia de nuestras regiones y de sus problemas". (Tovar, 1966:85). Es que con ellas los alumnos tienen la posibilidad de aplicar, confrontar y enriquecer conocimientos de la realidad nacional. Ese conocimiento de la realidad hace posible que el hombre actúe y reflexione, tome conciencia de la problemática que confronta y de la necesidad de transformarla.

San Juan, una nueva maravilla

DONDE SE CAMINE EN SAN JUAN PUEDE ENCONTRAR CULTURA E HISTORIA POR ESTUDIAR
Detrás del Misti a más de 4 400 m.s.n.m. existe un área natural turística inexplorada por el viajero. Chacchar coca y tener resistencia, serán necesarios en este encuentro con la biodiversidad desconocida.
¡Inimaginable! Así es el distrito de San Juan de Tarucani. Donde el viento helado y a veces fuerte, que ocurre debajo de una densa niebla peculiar durante los tres primeros meses de cada año, se ha escondido por miles de años un escenario natural de potencial turístico desconocido para mundo.
La decisión se inicia dos días previos. – ¿Te atreves a subir en moto hasta San Juan?- pregunta Mauricio Pumacota Huachani, guardaparque de la Reserva Nacional de Salinas y Aguada Blanca (RNSAB). Eran las 7 de la mañana. La moto arrancó. Fuimos dos viajeros. El domingo 12 de abril la velocidad de la moto, permitió no sentir el frio de aquella mañana. Aunque la densa niebla al llegar a los más de 3 mil m.s.n.m, luego de pasar un túnel, llegó a molestar las piernas que por momentos se adormecieron, pero ya faltaba poco para llegar a la base en la comunidad de Salinas Huito del distrito de San Juan de Tarucani.
- ¡Llegamos¡ Fueron dos horas y media en moto. En bus hubieran sido cuatro horas desde el mismo lugar de inicio. Me hospedé por un día en el puesto de control de Salinas Huito, perteneciente a la RNSAB. Ahí aprovechamos la noche para observar de cerca las estrellas y algunas luces a lo lejos, que según Mauricio “se trataba de un tapado de oro”.
El día se apagó pronto, como se apagan los días en otoño. Ingerimos un desayuno ligero. Esperamos la camioneta con tres guías más, transporte ideal en zonas rurales. De Salinas Huito partimos hacia San Juan de Tarucani. Luego de unos 45 minutos nos dimos cuenta que ya eran las doce del día.
El grupo para la expedición quedó conformado por: Fredy Quispe Ydme, Filomeno Quispe Chancolla, ambos guardaparques de la Reserva Nacional de Salinas y Aguada Blanca por parte del Contrato de Administración (CA), establecido con la ONG desco (para el mejor aprovechamiento y uso de los recursos naturales del Área Natural Protegida) y don Juan Zapana Choque, Presidente de Promoción Pecuaria de Vicuñas de San Juan de Tarucani, el guía principal y conocedor de la nueva maravilla natural turística.
Castillos de roca
Los cinco integrantes partimos esta vez desde el mismo San Juan de Tarucani. El primer destino: una formación rocosa caprichosamente formada por la erosión del viento. Luego de 30 minutos en camioneta por una trocha, llegamos hasta el establo Sancana. Desde ahí nos sorprendió ver que ese conjunto de piedras es similar a unos imponentes castillos de roca, ideales para una foto postal.
A doce minutos nos encontramos con Alejandrina Velásquez Chancolla (24). Una joven que juntó sus fuerzas a la de algunos varones para arreglar el cerco de vicuñas de Tari, donde el forastero puede contar hasta 350 vicuñas en un área de 900 hectáreas - 12 kilómetros lineales.
Alejandrina junto a su pequeño hijo Christian Velásquez (05), saben que organizadamente los propósitos son más fáciles de lograr. El principal por ahora: atraer el turismo pero responsable. “Nosotros somos poseedores de bofedales, cerros encantados y preciosas vicuñas”, dijo inconteniblemente Alejandrina.
Rastros de un volcán
La expedición recién empezaba. Don Juan Zapana tiene 75 años, pero la juventud de viajero le sobra. Lo seguimos. Así llegamos a una altitud de 4 184 m.s.n.m hasta la cabaña Picotampata. Desde allí lo que se vio era para no creer.
“Según contaban nuestros ancestros, hace miles de años en esta zona existió un volcán. Una fuerte explosión dejó este hueco cuya profundidad desconocemos. El impacto fue muy fuerte”, nos contó un jovial Juan Zapana, además ex alcalde de San Juan de Tarucani en el período del año 1 983 al año 1989. Aquí los estudios de antropología e historia, determinarían datos exactos y se sabría qué ocurrió realmente.
Huella del cóndor y de Dios
En el territorio de esta cabaña, donde además se conserva un cerco semillero de tola de 47 hectáreas impulsado por especialistas del Contrato de Administración entre la RNSAB y la ONG DESCO, las sorpresas no acababan.
En una roca don Juan nos mostró claramente la marca de la pata de un cóndor y al costado de la misma también se quedó impregnada la huella de una pisada humana. ¿Quién dejó estas marcas? Don Juan y ahora Mauricio Pumacota se han grabado la leyenda que cuenta que en esta piedra se habría parado un cóndor para proteger a Jesús del diablo. Otra teoría podría ser que alguien años atrás, grabó esta huella de cóndor de un centímetro de profundidad y de 10 por 15 centímetros de longitud total.

Cueva a lo desconocido
La tarde nos sorprendía. Un chullo en la cabeza y una gruesa casaca para cubrirse hasta la nariz nos protegió de corrientes de viento a veces fuerte a veces suave que aumentaban el frio en esta altura.
De las huellas caminamos 800 metros cuesta arriba hasta la zona llamada Molleponco Chico. Don Juan nos adelantó minutos antes de la evidencia de un profundo túnel y efectivamente. Nos paramos frente a un túnel. Mauricio y Fredy se acercaron. – No vemos nada - dijeron.
“El túnel tiene una profundidad de 5 kilómetros de longitud en dirección al cerro Carpanani. Dicen que por aquí Jesús logró escaparse del diablo”, compartió Juan Zapana.
Pinturas rupestres y rostro Inca
Pero… ¿y la salida? – ahora hacia allí nos dirigimos- respondió don Juan. Las maravillas no terminaban. Una formación rocosa de una altura desafiante y perfecto para el deporte de aventura nos decía: “vengan y suban sobre mí”.
Eran más de las dos de la tarde. Mentalizados por el frio llevamos pesada ropa de abrigo, pero Mauricio nos recomendó que en la segunda expedición deberíamos usar ropa ligera y zapatos adecuados para montaña.
Ubicados ya en la planicie. Una base adecuada para en grupo iniciar la subida, don Juan experto conocedor del lugar, nos mostró las grabaciones de curiosas pinturas rupestres. Contamos 10 hombrecitos, al parecer guerreros de color ocre, que portaban un tipo de armamento en el hombro. ¡Impresionante! Al frente en otra cueva don Filomeno Quispe y Mauricio encontraron una pequeña cueva con señales al parecer de cruces, también del mismo color. Eran también diez y a la vista en la planicie se ven además diez montones de roca, que los antiguos llaman apachetas. Todo está intacto aunque algunos ingenuos del tesoro ya quisieron rasgarlo. Este es un legado que debería estudiarse.
En un momento, don Mauricio de una mirada fijó una piedra con perfil de un inca. Entonces la bautizamos como con derecho a hacerlo con el nombre de “rostro Inca”. La imaginación esta vez no nos engañó.
Subiendo al Carpani
El cierre de la expedición superó nuestras expectativas al estar frente al cerro Carpani. Por momentos dudamos subir a ese imponente cerro de rocas en pendiente. – ¿Si nos gana la noche?, - ¡Se ve peligroso!,- ¿llegaremos arriba?, nos decíamos.
- ¡Pues vamos! Don Juan iba marcando el camino. Fredy Quispe y Filomeno trepaban al mismo ritmo. Don Mauricio y yo seguíamos detrás. Nuestros brazos fueron nuestras sogas y nuestro sostén la espalda.
A medio camino o mejor dicho a media altura de la cima, la respiración fue más rápida. ¡Prohibido mirar abajo! Cualquier movimiento en falso, un mareo y todo estaba perdido. Era momento de querer a las piedras, abrazarlas con fuerza. Sentirse seguro al sujetar la tola o queñoa que habían crecido por ahí para sostenerse y seguir subiendo.
¿Don Juan llegamos? – Sí, pasamos el peligro- nos dijo. Habíamos demorado tres horas en subir. Pero llegamos exactamente a 4 447 m.s.n.m. Estábamos sobre el Carpani. Ahí encontramos la salida del misterioso túnel. Soltamos una piedra y nunca sentíamos el final.
Desde ahí contemplamos la despedida del atardecer. La represa El Frayle y la laguna del cerro Orronsani. Las formaciones naturales en la tierra. Sencillamente sentimos el placer que la naturaleza nos regala.

En lo alto recordé al pequeño Christian Velásquez que me dijo: “Mira al cielo, las nubes nos persiguen. Mira los cerros, siempre nos acompañan cuando nos acercamos a ellos. Pero ¡mira¡ - ahora estamos lejos y ya no los vemos, ¿sabes? todo esto nos pertenece”. Y es que lo natural es de valor incalculable.

Por hacer
Conocedores de este legado natural. La asociación de Criadores de Vicuña apoyados por la Jefatura de la Reserva Nacional de Salinas y Aguada Blanca, especialistas del CA por parte de la ONG desco y la Municipalidad de San Juan de Tarucani, se ha propuesto una actividad que mostrará estas reliquias en el mes de setiembre.
El tiempo ya es corto. El Presidente de dicha Asociación, Eloy Choque Flores, nos contó que la asociación conformada por 72 socios inició los trabajaron de marcación de vías, arreglos y señalización de rutas.
Estima que necesitarán un presupuesto de once mil soles. Las gestiones de apoyo están en marcha. Acudirán a la Municipalidad Provincial de Arequipa y al Gobierno Regional para lograr sus objetivos.
“Son nuestros primeros pasos. Queremos acondicionar restaurantes, espacios para recibir a los visitantes, arreglar nuestras vías de acceso, pero es un largo proceso. Tenemos lo principal, pero queremos involucrar a nuestras autoridades de Arequipa para que nos ayuden”, remarcó entusiasta Eloy Choque y razón no le falta.
Importante
El distrito de San Juan de Tarucani está ubicado a 4 200 m.s.n.m. en la misma capital del distrito, viven un promedio de 200 familias.
Su principal actividad es la ganadería y artesanía.
Durante los tres primeros meses del año, sus cerros Condori y Aldaba, principalmente se convierten en preciosos nevados.
En la cima de sus cerros habitan también las tarucas (un tipo de venado), águilas, halcones, vizcachas, pequeños reptiles, zorros, pumas y otras especies de fauna que están rigurosamente protegidos del hombre por la RNSAB, dentro del Área Natural Protegida.